indómitas
Fue la primera progamadora de comciertos en la Sala El Sol. Por sus manos han pasado los más grandes de la música nacional e internacional Atesora innumerables anéctodas y asegura le ha hecho muy feliz. Hace poco se retiró de la vida nocturna, pero su vida profesional sigue vinculada a la música tras fundar MIM, la asociación de Mujeres en la Industria Musical.
Vendió su primer cuadro a los 14 años, cuando se dio a conocer clavando sus pinturas con chinchetas en la Plaza del Paraguas de Oviedo. A partir de los 16, Blanca de Nicolás se especializó en retrato y, sobre todo, en desnudo masculino, lo que le ha supuesto tener que luchar cada día contra los prejuicios y la censura. Confiesa que, para mucha gente, una pintora sigue siendo “una mujer que pinta”, pero eso no la ha detenido para seguir haciendo arte.
Un doctorado sobre el comportamiento de jaguares, pumas y ocelotes llevó a Noa González Borrajo a vivir por temporadas en las selvas de México, Belice y Brasil. Su pasión por los grandes mamíferos le ha llevado a trabajar en la conservación del oso pardo cantábrico y a ser líder científica de entidades internacionales.